Bienvenidos

Sean bienvenidos a la etapa triste de una borrachera. Las etapas de la alegría extrema y de los te quiero se acabaron. Esas fueron las buenas, ahora tocan las malas.

Todo lo que tenía y por lo que luchaba se esfumó tras un soplido. Sólo hizo falta eso para romper la cuerda que nos ataba. Una mierda de soplido. Es lo que pasa cuando se juega con el corazón de otra persona...

Ahora mismo me encuentro en una isla desierta buscando algo que me salve de la angustia. Un barco que no llega y yo aquí subiendo a la palmera una y otra vez. Esta parte de la vida es una mierda. No volveré a beber. Já.

Luego se preguntan por qué la gente es así. Lo malo que tienen los recuerdos es que te asaltan en cuanto menos te lo esperas. Y suelen venir después de grandes ingestas de alcohol. Todo el mundo es feliz con sus parejas. Todo el mundo parece complacerse con una paja al día...

A mi eso no me sirve. Lo malo de estar triste es que empiezas a pedir y a pedir y al final te quedas como al principio: sin una puta mierda.

Con el pijama, oliendo a colonia y con un incipiente dolor de cabeza que augura una mierda de domingo. Escribiendo una nueva entrada en un blog que hiciste en mejores tiempos por el capricho de otra persona. Esta vida es una mierda. Siempre actuamos buscando la aprobación de alguien.

¿Acaso tus estados del Tuenti no van siempre dirigidos a alguien? ¿Acaso tus miradas no buscan siempre una sonrisa cómplice que te ayuden a llevar toda la mierda con la que tienes que cargar a la espalda?

Estoy hasta la polla de tener que contarle a los que de verdad me importan mis penurias. Quiero contárselas a alguna desafortunada que elija pasar las soporíferas tardes conmigo. Que escuche mis gilipolleces y piense: coño, este es un tipo guay.

Y en lugar de eso tengo que llenar ese hueco con alcohol. Esta mierda no es la que yo elegí, ¿sabes? Todo podía haber sido tan bonito... una polla.

"Y que bonito hubiera sido y todo eso... ya bueno, el caso fue que no estabas allí".

Si estás tomándote en serio cualquier bazofia que escribo, estate atento: la vida va a darte palos hagas lo que hagas. La gente va a putearte hasta límites insospechados. Quien bien te quiere bien te hará llorar. Y lo pero de todo es que el único remedio que tienes para desahogarte son unos colegas que bastante tienen con lo suyo y un blog que nadie lee.

Y luego me preguntan el por qué de estar tan serio. No os habéis parado a pensar en lo puta mierda que es una borrachera cuando ya no queda nadie a tu alrededor.