¿No es así?

Pim, pam, ¡toma fin de semana! Joder las semanas pasan volando que da gusto verlo. Parece que fue ayer cuando era jueves y estábamos bebiendo botellines por la calle. Qué vida la del estudiante más sufrida. Pero bueno no estamos aquí para eso.

Hoy he estado pensando (demasiado largos los viajes en tren). Es sobre el arrepentimiento. En concreto sobre el no-arrepentimiento. Más de una vez hemos hecho algo de lo que no estábamos seguros del todo y la hemos jodido bien (demasiadas diría yo). O el caso contrario, nos hemos quedado sin hacer algo que deberíamos haber hecho. Hay una solución: joderse. Miento, no hay una, hay dos: joderse y seguir pa'lante.
Arrepentirse está sobrevalorado, es de cobardes y además nos deja mal cuerpo. Te salen unas patas de gallo que no quisieras verlas, oiga.

Si no hiciste algo por miedo a posibles consecuencias y ahora te arrepientes, hazlo. No lo dudes un segundo más. Deja de leer esto, para la música, da igual, ya habrá tiempo para eso. Dile lo que tengas que decir a quien tengas que decírselo. Haz lo que tengas que hacer y como tengas que hacerlo. Eso es lo de menos, el caso es que mates a cañonazos ese sentimiento mierdoso que te reconcome por dentro. Puede que luego sea peor el remedio que la enfermedad, pero eso, a mi, me la suda.

Es una cabronada que sea yo el que os de lecciones de vida, pero si os enseño esto es porque ya me ha pasado a mi antes. Y, oye, te quedas de un a gustito que no hay comparación.

Ser un cabra loca en su justa medida es lo más sano que hay. Después del onanismo, claro. Bien, ahora que has buscado en Google qué es onanismo y has pensado que soy un cerdo, sigamos.

Si te gusta esa tía, díselo. Si te da calabazas, díselo dentro de tres días de nuevo. Si quieres raparte al cero, hazlo, ya te crecerá el pelo (y si no te crece es hora de que busques en Google la palabra calvicie). En serio tío/a, no hay nada mejor como el momento después de hacer eso que has querido hacer durante tanto tiempo. Es comparable a mear justo antes de ser recordado como el idiota que se meó encima.

Si te quieres cagar en alguien díselo a la cara y déjate de indirectas vía nick de Msn, Tuenti, Facebook, redes sociales, amigas, conocidos... díselo a la cara: ME CAGO EN TU PUTA ESTAMPA. Qué más da lo que pueda pasar luego. Como mucho esa persona dejará de hablarte, pero... ¿acaso no era eso lo que querías? Ais, cuanto os queda por aprender, pipiolos.

La conclusión que sacamos hoy es la siguiente: deja de arrepentirte como un/a gilipollas. Échale un par ahí y dile al mundo lo hijo puta que ha sido, lo mucho que se va a arrepentir de haberte estado jodiendo. Vive la vida como si fuese la única que te queda. Al fin y al cabo, ¿no es así?