Si no es contigo

—Como no corras vas a perder el tren.
—De qué sirve ir a cualquier parte si no es contigo.

Los días van y vienen, algunos más largos y otros más cortos, pero al final todos acaban siendo polvo debajo de la alfombra y encima de los libros de la estantería.

Ese pueblo lleva escrito tu nombre en la corteza de sus árboles desde hace mucho tiempo y sólo espero que el que está debajo del corazón que los separa acabe siendo el mío. Por si acaso, voy afilando la navaja.

El sabor de una despedida siempre va a dejar un regusto amargo, sin importar el tiempo ni la distancia. Lo cierto es que a más de un palmo de mi cara suena demasiado lejos.

Que el hombre tropiece dos veces con la misma piedra pierde todo su mérito cuando hablamos de mí, que elegí el camino más difícil agarrándote la mano y mirándote a los ojos. Debe ser que me gusta el vértigo de verlo todo desde esta nube.

Las palabras van y vienen, también, y acaban siendo polvo si son las adecuadas y hacen que quieras quitarme la ropa. Esas no aparecen en los libros a no ser que sea yo quien los escriba y por cómo está de telas de araña todo esto no tiene ninguna pinta de que lo vayan a hacer.

El resumen perfecto es que no somos capaces de hacer resumen, que haya que calificarlo como "bueno, extraño" o que, simplemente, no queramos que haya un final que lo facilite. Además, soy pésimo en ello y no creo que quieran escuchar toda nuestra historia de nuevo.

Los aviones tienen la capacidad de hacer que, una vez dentro, todo nos parezca más complicado y difícil de llevar. El Qué Fue, Qué Es o el Cómo Va A Quedar Una Vez Termine Todo Esto no caben en una maleta de mano y si cabe, malo.

Lo mejor es llevar el Qué Fue, que alguien nos traiga el Qué Es y dejar que el Cómo Va A Quedar Una Vez Termine Todo Esto haga que cerrar la maleta parezca imposible y sintamos pánico de que se abra en medio del aeropuerto. ¿No crees?

El día que seamos capaces de averiguar cómo terminan las historias perderemos todas las ganas de querer vivirlas.

Yo, por el momento, no quiero imaginar el final, porque de qué sirve ir a cualquier parte si no es contigo.